El presente trabajo analiza el papel de los BRICS en el orden internacional y su potencial reconfiguración, poniendo el foco en cómo China, principal potencia del grupo, emplea esta plataforma en su estrategia exterior para desafiar la primacía de Occidente. A partir de fuentes primarias, secundarias y entrevistas a expertos, se estudian la evolución del bloque, la estrategia china, la rivalidad China-Occidente y las perspectivas de futuro del grupo. La investigación examina la trayectoria histórica y económica de los BRICS, su creciente peso global, el debate sobre la desdolarización y la posibilidad de una divisa común. Igualmente, se abordan los factores de cohesión y de disgregación internos, así como el modo en que estos condicionan la supervivencia del bloque. Se presta especial atención a las iniciativas de China para ampliar su influencia, a la reacción occidental y a la función de los BRICS como plataforma de poder en la disputa por la gobernanza global. La investigación concluye que, aunque los BRICS representen una alternativa al orden liberal occidental, reforzando
la tendencia hacia la multipolaridad, su capacidad transformadora se ve limitada por las contradicciones y diferencias internas, la disparidad de intereses entre sus miembros y la falta de una definición del grupo de cara al futuro.
The research analyzes the role of BRICS in the global order and its potential reconfiguration, focusing on how China, the leading power within the group, uses this platform in its foreign strategy to challenge Western primacy. Drawing on primary and secondary sources, as well as expert interviews, the study examines the evolution of the bloc, China’s strategy, the China-West rivalry, and the group’s future prospects. The research explores the historical and economic trajectory of BRICS, their growing global weight, the debate on dedollarization, and the feasibility of a common currency. It also addresses internal factors of cohesion and fragmentation, and how these condition the bloc’s survival. Particular attention is given to China’s initiatives to expand its influence, the Western response, and the role of BRICS as a platform of power in the competition over global governance.The study concludes that, although BRICS represent an alternative to the Western liberal order and reinforce the trend toward multipolarity, their transformative capacity remains constrained by internal contradictions, divergent interests among members, and the lack of a clear definition for the group’s future.